sábado, 13 de noviembre de 2010
El espíritu del desencanto
El rechazo hacia los demócratas en Norteamérica se explica en gran parte por la disminución real de los ingresos de la mayoría de la población, porque las horas de trabajo han aumentado y la inseguridad es mayor cada día, la deuda ha crecido y la desigualdad es descomunal, la riqueza la concentran unos pocos. Las causas anteriores han generado enojo, desencanto e incertidumbre. Los demócratas en el poder pagaron las consecuencias. La crisis no brotó por generación espontánea, según los especialistas, se fue gestando desde los setenta, pero para los electores estadounidenses los culpables son Obama y el Partido Demócrata, quienes no han tenido capacidad para enfrentarla.
La gente con todo el derecho del mundo exige respuestas y no ve por dónde aparezcan. Noam Chomsky sostiene: "La gente ve que los banqueros responsables en su mayor parte de la crisis financiera y que fueron rescatados de la bancarrota por el público ahora están disfrutando de enormes bonos y utilidades sin precedentes. En tanto, el desempleo oficial permanece aproximadamente en 10 por ciento. La manufactura alcanza niveles de la Depresión; una de cada seis personas carece de empleo y es remoto que los buenos trabajos regresen". Esto es un reflejo de la misma situación en nuestro país.
A diferencia de México, allá los demócratas no se quejan que los republicanos no los dejan trabajar. Aquí los panistas no se pueden quejar de sus políticas causantes del desastre, ellos las han implementado en 10 años de gobierno. Otra de las paradojas del mundo globalizado es que las izquierdas son las grandes perdedoras, antes ganaban en las crisis económicas, ahora sufren una gran polarización entre su base electoral y la dirigencia de su partido, pues no han demostrado capacidad para impulsar políticas públicas y programas en apoyo de la gente. En este contexto ¿cuál será el resultado en 2011 de las alianzas PAN-PRD, entre la izquierda y la derecha?
El PRI perdió en Oaxaca y Puebla principalmente por una mala gestión y por una confrontación permanente con los ciudadanos, por la polarización de la sociedad. En una situación de crisis económica y de seguridad se demanda paz y solución de los problemas. Cuando la inestabilidad se fomenta desde el Gobierno, los ciudadanos lo cobran en las urnas. En Oaxaca esto venía desde tiempo atrás y el resultado se expresó el día de la elección. En Puebla se desgastó por el caso de Lydia Cacho, porque se ventilaron conferencias evidenciando actitudes negativas del Gobernador. Lo anterior logró un distanciamiento del Mandatario con las clases medias, con los pequeños y medianos empresarios. El manejo inadecuado con los medios de comunicación desmotivó a los ciudadanos. La sociedad poblana es muy tradicional, es defensora aguerrida en la temática que atente contra la moral y las buenas costumbres. Coinciden con las posiciones de los grupos protectores del matrimonio, penalizadores del aborto, opositores al matrimonio homosexual e impulsores de campañas que repriman las relaciones sexuales, opositoras a promociones desenfrenadas de la revolución sexual. En estos movimientos hay una mayoría de mujeres que sienten que deben proteger a sus familias de esos cambios tan dañinos. Si a esto le agregamos las divisiones internas de las fuerzas del tricolor, el resultado se presenta obvio.
En cierta medida en Torreón sucedió una situación parecida encabezada por el grupo autodenominado "Mujeres por Torreón", hoy aunque se presentan con otro nombre, "Mujeres por un Coahuila seguro", las estrategias son las mismas, una guerra permanente de lodo. Ellas se ostentan como la conciencia de la sociedad y amenazan con su pureza moral. Dichas manifestaciones se expresan en coyunturas electorales, por eso no deben tomarse a la ligera estos gremios que apelan al miedo y al resentimiento. El desencanto ciudadano es capitalizado por estos grupos que apalancan sus denuncias en posiciones moralizantes para transformarse en una fuerza político-electoral y agregarle el plus a su partido político, para completar los votos que les faltan y así ganar la elección, sin importar la polarización de la sociedad.
jshvelez@hotmail.com
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