Un par de años fueron suficientes para cambiar las preferencias electorales. Obama pasó de la euforia popular al ajuste de cuentas. Aunque el Partido Demócrata conserva en cierta medida su base electoral en esta coyuntura, perdió al grupo de los votantes indecisos, esos electores volátiles decepcionados porque no se dieron los cambios anhelados. No le cumplió a las pequeñas minorías, a los homosexuales en las fuerzas armadas, ni a la "izquierda profesional".
Hoy los ciudadanos disponen de información sobre el entorno político social en el que se desarrollan; así es en los sistemas democráticos, los electores son los protagonistas del poder y tienen la facultad para tomar decisiones en torno a los gobernantes y sus acciones. Los residentes saben en qué se equivocan los gobernantes y lo cobran en las urnas al elegir a los representantes políticos y tomar decisiones sobre cuestiones importantes de la vida pública.
En México, en julio del año pasado los ciudadanos le cobraron al PAN los incumplimientos de Fox y la mala gestión de Calderón. Perdió la mayoría en la Cámara de Diputados, y aunque ganó estados en este año, en los que se alió con el PRD, en la mayoría no convenció. Ahora se enfrenta al ejercicio de gobernar y esto será evaluado por los electores en aquellos estados donde concrete para el 2011 nuevas alianzas. A la hora de decidir, los electores estarán informados cómo están gobernando los aliados, el PAN y el PRD. Cada partido también evaluará las cuotas de poder que convinieron producto de la alianza que firmaron. El tiempo lo dirá. Y cuando llegue el momento de la elección del nuevo Presidente de la República ya habrán pasado dos años, tiempo suficiente para evaluar las administraciones producto de las alianzas. El resultado electoral del Estado de México para el PRI no es tan definitivo.
En el caso de Coahuila, la última encuesta exhibe al PRI como el partido mejor posicionado para el 2011. La empresa Gabinete de Comunicación Estratégica informa de una amplia diferencia entre Rubén Moreira y otros cuadros priístas; en relación con el senador Guillermo Anaya, la brecha se antoja imposible de ser remontada si se animara a competir, se refleja la caída de las tasas de aprobación de Calderón, a pesar de que sigue siendo popular entre su tropa albiazul. Los costos de la guerra contra el crimen organizado se los irán cobrando los electores.
En Torreón, el bastión más importante del panismo en Coahuila, la percepción de los electores ha cambiado. Analicemos las siguientes cuestiones: ¿por cuál o cuáles partidos nunca votaría?, ¿qué partido político representa para usted... El cambio, el engaño, la ambición, el mal gobierno, la deshonestidad, la corrupción, el más mentiroso? Antes del 2008 los encuestados contestaban que el PRI, ahora afirman que el PAN. En cambio, sostienen que la experiencia y la capacidad son características del tricolor. Ante la pregunta ¿cuál cree que es el más antidemocrático?, declaran que el PAN. Y cuando abordan lo referente a ¿Cómo ve usted el PRI actualmente, como un partido que cuando se opone al gobierno lo hace razonablemente, o se opone sólo por ir en contra del gobierno? Opinan que se opone razonablemente. Y si los cuestionan sobre ¿cómo ve usted al PRI actualmente, como un partido que está ganando apoyo popular nuevamente, o que se está debilitando? Se inclinan que está ganando apoyo electoral. No cabe duda las elecciones las ganan aquellos que convencen a los electores volátiles. Apenas hace tres años los ciudadanos votaban de otra manera.
jshvelez@hotmail.com
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