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sábado, 23 de julio de 2011

Disputa presupuestal

Leí con atención la columna de Eduardo Holguin "Democracia en venta". Me llamó la atención el siguiente párrafo: "La aburrida bola de cristal me dice que en el debate sobre el "Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), 2012" veremos a un PRI desgarrándose las vestiduras por incrementar las millonarias partidas a favor del campo, o como dirían otros, a favor de la inagotable fuente de votos duros tricolores". Considero prudente hacer unas reflexiones en relación a estas apreciaciones. 

La disputa por el reparto del presupuesto me parece que obedece a otras lógicas, más que a la electoral. Los términos de la disputa en cierta medida los establece la propia Secretaría de Hacienda, más que los grupos legislativos, pues quien elabora el presupuesto es el Presidente a través de Hacienda. En relación a que la "fuente de votos duros tricolores" está en el campo basta con dar un rápido vistazo a la distribución del sector rural en el país, para concluir que el PRI ha ido fortaleciendo sus bases más bien en los sectores urbanos. Sólo el año pasado el tricolor perdió Puebla, Guerrero, Sinaloa y Oaxaca que cuentan con una gran población rural. La tierra de Emiliano Zapata, el estado de Morelos, está en manos del PAN, Guanajuato y Jalisco que tienen un fuerte sector rural también está en manos albiazules. Y el norte del país que es urbano, casi todo está en manos del tricolor, porque Baja California a nivel municipal es priista, Sonora es la excepción. 


En términos generales la población rural se distribuye mayoritariamente en el sur del país, sin embargo cabe señalar que ésta en las últimas décadas ha disminuido. Incluso en los bastiones rurales del norte, por ejemplo en la Laguna (Coahuila - Durango) la población ya es mayoritariamente urbana, y eso que la Laguna es el área de mayor actividad agropecuaria en el estado de Coahuila. Según las fuentes económicas y financieras que se publican en fin de año en los dos diarios de mayor circulación en Torreón, la aportación del sector agropecuario a la economía de la región apenas alcanza el 11 por ciento. El otro 89 por ciento lo aportan los sectores comercial y de servicios, así como el industrial. 


La Laguna es pues un ejemplo de cómo las actividades agropecuarias han ido a la baja y en consecuencia el presupuesto. Pero veamos las cifras del presupuesto federal. El total asciende, como dice Holguin a "una bolsa de 3.5 billones de pesos". Esto incluye el gasto programable de los ramos administrativos que fue más o menos propuesto en 792 mil millones de pesos, los ramos autónomos en 63 mil millones de pesos, los ramos generales en 858 mil millones de pesos, el gasto programable de las entidades del control directo (ISSSTE, IMSS, CFE y PEMEX) es de un billón 116 mil millones de pesos y el gasto no programable (donde se incluye la deuda) es del orden de 774 mil millones de pesos. De este presupuesto la "millonaria partida a favor del campo" que fue aprobada para la SAGARPA es del orden de 73 mil millones de pesos, que representa de la "bolsa total" apenas el 2 por ciento. Si además el país está gobernado en lo federal por el PAN y en los estados por albiazules, del sol azteca y tricolores, ¿en dónde queda la "inagotable fuente de votos duros tricolores"? 


Veamos un poco más de cómo se reparte el presupuesto. El gasto programable para 2011, propuesto para las dependencias del Ejecutivo Federal fue de un monto de 792 mil 127.8 millones de pesos. Dentro del conjunto, las dependencias con los mayores incrementos, en términos reales, fueron: la Secretaría de Gobernación, que en cumplimiento de lo contenido en el artículo vigésimo sexto del Decreto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio fiscal 2010, se incrementó en un 78.1 por ciento, en términos reales y la Secretaría de la Defensa Nacional en un 10.3 por ciento real. 

Y la mayor disminución en términos reales, con respecto al presupuesto de 2010 que propuso el Presidente Calderón se encuentra en la SAGARPA con un 22 por ciento. En todo caso esta disminución resulta inconsistente con lo que se planteó en los Criterios Generales de Política Económica para 2011 en el sentido de que dicha política se orientará preponderantemente, entre otros objetivos a apoyar el desarrollo social y el crecimiento económico ¿Entonces pues en la disputa por el presupuesto quién se desgarrará las vestiduras el Presidente o los partidos? 
 
Salvador Hernández Vélez
jshvelez@hotmail.com

 

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