Hoy 4 de octubre se cumplen 10 meses de la helada del 4 de febrero de este año. Las consecuencias están a la vista. Lo que más me ha llamado la atención es que los árboles que se afectaron y que ahora están secos y sin tumbar siguen conservando sus hojas, a pesar de que ya van más de 300 días en espera de que los sustituyan por otro de la región, que sería la mejor opción. Todos los días hablamos de que las cosas están mal y le echamos la culpa a los demás y en esto del problema de la falta de árboles en nuestra ciudad, situación en la cual no podemos "culpar" más que a la naturaleza que se comporta de esa manera debido a nuestros hábitos de consumo producto de la modernidad a la que hemos llegado degradando nuestro planeta.
Cada día que transito por nuestras calles aquí en Torreón observo fenómenos en los árboles como consecuencia de las bajas temperaturas de febrero pasado, en la colonia Torreón Jardín, sobre la calle Nogal hay un pingüico que llama la atención, primero como se le helaron las hojas, lo podaron, y luego le brotaron ramas que iban creciendo hacía arriba, al paso de los días se doblaron y así permanecieron por varias semanas, ahora todas las ramas están secas. Se les agotó lafuerza. En los árboles vecinos empieza a manifestarse un comportamiento similar ¿Será ésta la suerte de los demás ficusque se afectaron con la helada y que después brotaron en forma deracimos?
Lo más grave es que hay muchos huecos que dejaron los árboles que se helaron. Habrá que hacer conciencia entre los ciudadanos para que planteen árboles nativos. Por comentarios de amigos deduzco que hay una posición deque los árboles de nuestra región no los plantan porque son feos, tiran mucha basura, anidan pájaros, levantan las banquetas con sus raíces, no tienen el verdor de los del sur del país. Exhiben muchos argumentos, pero cuando uno les pregunta que si conocen un mezquite(prosopis chilensis), o una anacahuita, o una acacia, o un nogal, oun álamo, o un algarrobo, o algún otro propio para ésta región,responden que no los conocen.
¿Luego les preguntoentonces cómo es que no les gustan? Es como la actitud de mi hijaJimena cuando dice que alguna comida no le gusta aunque no la hayasaboreado. Entiendo ésta posición de los adolescentes porque en realidad sólo quieren comer lo que el marketing les ha posicionadoen su cerebro, a todo le quieren poner catsup o hasta se comen untaco con limón y sal, y para que les sepa bien un buen trozo decarne se lo comen bien cocido y con limón. Conozco adolescentes que hasta a un par de huevos estrellados le ponen limón.
Pero bueno no hay que perder la esperanza, con el tiempo el abanico de sabores de estos jóvenes se ampliará. Así espero que suceda con nosotros los adultos que aprendamos a apreciar y a amar nuestro desierto, como un amigo alemán que vivió en nuestra Laguna y aquí dejó sus restos,el ingeniero Günter Bauer un gran conocedor de los semidesiertos que declaraba a los cuatro vientos (más bien a las cuatro polvaredas laguneras) que el le tenía "un gran amor a la espina" ¿y nosotros cuándo desarrollaremos ese amor por la flora de nuestro semidesierto? ¿Cómo es posible que un alemán venga a enseñarnos el amor por nuestro terruño?
Y para no perder la esperanza y dado que se sostiene que "de la vista nace el amor "aquí les van unas propuestas de árboles que podemos plantar y queson nativos o ya aclimatados pero que demandan menor cantidad deagua. En la colonia Torreón Jardín en la esquina de Mayran y Claveles pueden admirar unos hermosos mezquites que cubren de sombrano sólo la casa sino también la calle, o bien en la calle Acaciaspueden maravillarse con un huizache entre la Central y Laguna Sur, y en la Mayran casi esquina con Tejocotes hay una anacahuita (también hay abajo del puente sobre el periférico Raúl López Sánchez el que está enfrente de la casa Hogar del DIF), los algarrobos los puede contemplar en la pequeña plaza sobre la calle Laguna Sur al oriente, enfrente del estadio de beisbol infantil. O bien en la colonia Navarro pueden contemplar los olivos, alrededor de la secundaria del Tecnológico de Monterrey. Los nogales están en diferentes partes de la ciudad. También muchos otros árboles como álamos, fresnos, pirules, mimbres, sauces llorones entre otros se pueden apreciar en diferentes plazas de la ciudad. Los ejemplos ahí están para convencernos de que lo mejor es tener flora propia de nuestra región.
Salvador Hernández Vélez
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